La tarraxinha: el baile sensual de Angola y Cabo Verde que se popularizó en Portugal y Francia
Introducción
La tarraxinha es un baile sensual originario de Angola y Cabo Verde que se ha popularizado en Portugal y Francia en las últimas décadas. A menudo se describe como un baile sensual y sofisticado, que combina movimientos suaves y lentos con una música seductora y una actitud atrevida. En este artículo, analizaremos en profundidad la historia y la evolución de este estilo de baile, sus características y técnicas, así como su importancia cultural y social en diferentes contextos.
Orígenes de la tarraxinha
La tarraxinha tiene sus raíces en los ritmos africanos, especialmente en los estilos de kizomba y zouk, que se desarrollaron en Angola y Cabo Verde en los años 80. Estos estilos, que combinaban elementos de la música africana y caribeña, se popularizaron en Portugal y Francia en los años 90, gracias a la llegada de inmigrantes de esas regiones y al intercambio cultural entre las comunidades africanas y europeas.
La tarraxinha, en particular, se originó a partir del zouk love, una variante más lenta y romántica del zouk, que se convirtió en un éxito en las pistas de baile francófonas en los años 90. Algunos bailarines y músicos comenzaron a interpretar el zouk love con un enfoque más sensual y atrevido, dando lugar a la tarraxinha. El nombre de este estilo de baile proviene de la palabra portuguesa "tarraxar", que significa "apretar" o "pegar", en referencia a los movimientos suaves y cercanos de los bailarines.
Características y técnicas de la tarraxinha
La tarraxinha se caracteriza por movimientos suaves y lentos, con una gran atención a la conexión entre los bailarines y a la sensualidad de los movimientos. A diferencia de otros bailes de pareja, como el tango o la salsa, la tarraxinha no se centra tanto en la técnica o en la elaboración de figuras complejas, sino en la sensualidad y el juego de miradas y gestos entre los bailarines.
El ritmo de la música es lento y seductor, con un énfasis en los instrumentos de cuerdas, como la guitarra o el violín. La letra de las canciones suele hablar de amores pasionales y encuentros fugaces, con una gran carga emotiva y sensual. Los bailarines suelen bailar en un espacio reducido, con movimientos muy cercanos y envolventes, que a menudo incluyen giros, carruseles y movimientos seductores de cadera.
Para bailar tarraxinha, es importante tener una gran sensibilidad y capacidad de adaptación al ritmo de la música y al estilo de la pareja. Es necesario prestar atención a la conexión con el otro bailarín y a la postura del cuerpo, que debe ser relajada y fluida en todo momento. También se recomienda trabajar en la capacidad de improvisación y en la creatividad a la hora de añadir adornos y gestos a los movimientos básicos.
La importancia cultural y social de la tarraxinha
La tarraxinha tiene una gran importancia cultural y social en varios contextos, tanto en África como en Europa. Por un lado, se considera una forma de expresión artística y emocional, que permite a los bailarines conectarse entre sí y con la música de una manera muy intensa. Además, se ha convertido en una forma de identidad cultural para las comunidades africanas y caboverdianas que viven en Europa, que han encontrado en la música y el baile una forma de mantener su cultura y su identidad en un entorno diferente.
Por otro lado, la tarraxinha también ha generado controversia y críticas por parte de algunos sectores conservadores, que la consideran una forma de baile sexualizado que promueve una imagen estereotipada y negativa de las mujeres. Sin embargo, muchos defensores de la tarraxinha argumentan que es un baile sensual pero respetuoso, que promueve la igualdad y la conexión entre los bailarines, sin importar su género o su orientación sexual.
Conclusiones
En definitiva, la tarraxinha es un baile sensual y emocional que ha surgido de la fusión de diferentes estilos africanos y caribeños, y que se ha expandido por todo el mundo gracias a su capacidad para conectar a los bailarines con la música y con su propia sensualidad. Aunque ha generado controversia y críticas en algunos sectores, muchos defensores de la tarraxinha destacan su importancia como forma de expresión cultural y social, que promueve la creatividad, el respeto y la unión entre las personas.